- Anticorrosivo: protege las superficies metálicas planas, mecanismos y engranajes, inhibiendo y retrasando los procesos de oxidación y corrosión, manteniendo
su eficiencia y alargando su vida útil. - Reactivante: restablece la conductibilidad eléctrica eliminando dispersiones de corriente. No aísla los contactos, no genera arco eléctrico y disuelve óxidos,
aceites, grasas, lodos, alquitrán y residuos de combustión. Su característica dieléctrica restablece la eficiencia inicial de los contactos y los protege
durante el funcionamiento. - Lubricante: Lubrica eficazmente y por largo tiempo todos los mecanismos preservándolos del desgaste y la degradación debida a la fricción. Mantiene fluido y eficiente el movimiento. Elimina los chirridos, no genera incrustaciones ni cúmulos de grasa y no arruina las juntas de caucho.
- Repelente al agua: Protege las superficies contra la humedad y el agua evitando la acumulación de sales y depósitos calcáreos que podrían bloquear mecanismos
y deslizamientos. Protege contra la humedad y el deterioro de circuitos eléctricos y electrónicos ubicados tanto en el interior como externamente. - Limpiador: Limpia eficazmente superficies metálicas eliminando polvo, incrustaciones, grasa, óxido, resinas, adhesivos. Limpia y abrillanta superficies
cromadas. Seguro sobre aluminio y partes pintadas (para mayor seguridad, verifique la resistencia de la pintura sobre una parte escondida). - Desbloqueante: Desbloquea rápidamente y con poco esfuerzo todos los tipos de mecanismos o bulones bloqueados, gracias a su poder penetrante y sus aditivos
exclusivos. Penetra profundamente en los mecanismos bloqueados disgregando velozmente óxido y residuos.
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